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Manual de literatura preceptiva (1900)

En 1900, Pedro Nolasco Cruz publicó Manual de literatura preceptiva, volumen en el que presentó su visión acerca de elementos retóricos, de estilo y géneros literarios. Preparó este libro con el fin de que fuera utilizado por sus estudiantes de enseñanza secundaria y, en él, según Matías Rafide, se insinuaban los "puntos centrales" de su visión sobre la literatura (Rafide, Matías. "Pedro Nolasco Cruz (1857-1939)". Diccionario de autores de la Región del Maule. Talca: [s.n.], 1984, p. 114).

En el momento de la aparición del libro, Cruz era conocido como crítico literario y colaborador de medios periódicos, tales como La Estrella de Chile (1867-1879), El Independiente (1864-1890) y la Revista de Artes y Letras (1884-1890). También, había trabajado como profesor en el Colegio de los Sagrados Corazones en Santiago -lugar en el que había cursado sus estudios en Humanidades- a cargo de la cátedra de Literatura. En abril de 1900, el manual y otros dos libros para la enseñanza -Arte de la declamación de Adolfo Urzúa y Colección de ejercicios y problemas geométricos y algebraicos de O. M. Fraissinet- fueron presentados a la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile para su aprobación (Consejo de Instrucción Pública. Boletín de Instrucción Pública. Tomo 105, enero-diciembre de 1900, p. 286). El libro fue utilizado en la enseñanza secundaria y "por muchos años leído en las clases" del Colegio de los Sagrados Corazones (Silva Castro, Raúl. La Literatura crítica de Chile: antología con estudio preliminar. Santiago: Andrés Bello, 1969, p.19).

El manual presentó en sus primeras páginas un prólogo y una introducción que, a su vez, incluyó dos capítulos: "Nociones preliminares" y "Elementos de la obra literaria". Si bien daba cuenta de preceptos, en el "Prólogo", Cruz indicó que el libro presentaba algunas "innovaciones" en comparación a otros tratados sobre literatura. Mencionó que al hacer tales innovaciones, su "propósito ha sido adaptar al gusto moderno las enseñanzas de la literatura preceptiva, y simplificar el texto en lo posible, de modo que el profesor tenga tiempo para ejercitar prácticamente a los alumnos en el arte de hablar, de escribir, de expresarse con exactitud y elegancia. Esto es lo que importa, y no aquello de aprender reglas prolijas para cosas que ya no se hacen, o que uno puede hacer como más bien le parezca" (Cruz, Pedro Nolasco. Manual de Literatura Preceptiva. Santiago: Imprenta Barcelona, 1900, p. 3).

Como parte de las nociones preliminares de su Manual de literatura preceptiva, Cruz indicó que "la palabra literatura comprende cualquier género de conocimientos que tengan por objeto la belleza literaria, o sea la belleza que se manifiesta por medio de la palabra" (Cruz, p. 5). En particular la idea de "literatura preceptiva" hacía referencia a la manera de lograr escribir tal literatura, por lo que esta disciplina tenía como fin dar a conocer reglas y advertencias, aspectos a los que se abocó en su libro.

A continuación, el libro se dividió en una parte sobre el estilo y otra acerca de lo que denominó géneros literarios, considerando como los principales la poesía, la didáctica y la oratoria.

El estilo lo definió como "la forma particular de expresión ordenada a manifestar los pensamientos con belleza y eficacia" e indicó que para cuidar dicha expresión era necesario tener en consideración sus cualidades esenciales: la claridad, la naturalidad, la conveniencia y la melodía o la "cualidad externa del estilo", que "resulta del grato sonido de las palabras y de la acertada distribución de los acentos y pausas en la frase" (Cruz, p. 28).

Cruz incluyó una sección de notas respecto a sus pensamientos sobre el estilo en la que explicó algunas de las innovaciones que presentó en comparación con otros tratados. En relación con este apartado, se ha señalado que el manual "rebasa los límites habituales del tratado de didáctica elemental por las notas que contiene sobre el estilo, en donde el autor señaló los puntos salientes de la que iba a ser su doctrina como crítico literario de la literatura chilena" (Silva Castro, Raúl. La Literatura crítica de Chile: antología con estudio preliminar. Santiago: Andrés Bello, 1969, p. 18-19). Así, por ejemplo, Cruz mencionó que una de las diferencias con otros tratados de literatura preceptiva es que mientras estos han considerado "la pureza, la corrección, la propiedad, la novedad" como cualidades independientes, en su manual aparecieron como cualidades propias del estilo (p. 95).

A modo de lectura complementaria, el volumen incluyó un apartado titulado "Pensamientos sobre el estilo" en el que Cruz reunió un conjunto de citas de pensadores célebres que, a juicio del autor, "forman un código completo de buen gusto, y dan una norma en extremo autorizada y segura para todo aquello que se relaciona con la belleza de la expresión". También, presentó un listado de giros y locuciones expresivas y dos listados de palabras y sus usos con preposiciones (Cruz, p. 3).