Caja del Seguro Obrero Obligatorio.
Creada en 1924, junto a la Caja de Previsión de Empleados Particulares, la Caja del Seguro Obrero Obligatorio representó el paso más significativo para la constitución de un sistema de previsión social en Chile. Establecida bajo el principio de un sistema de reparto, pagaba los beneficios sociales de sus afiliados a partir del total de los dineros recaudados. Los aportes que reunía provenían de los trabajadores contratados, sus empleadores y el Estado.
De esta manera, la caja pagaba las jubilaciones, indemnizaciones por accidentes de trabajo o fallecimiento de sus cotizantes y, conforme avanzaba el siglo, se anexaron a estos derechos las asignaciones familiares y el seguro de cesantía. La inversión de los dineros de la Caja se concentró en el establecimiento de consultorios de salud y postas rurales, además de una importante participación accionaria en el Laboratorio Chile, destinada a abaratar los medicamentos requeridos por sus programas de salud. A partir de 1952 su reorganización administrativa dio origen al Servicio de Seguro Social y al Servicio Nacional de Salud.