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Vicente Huidobro en España

Vicente Huidobro viajó en cuatro ocasiones a España, país en el que desarrolló y publicó algunos de sus libros más reconocidos, como Altazor (1931) o Temblor de cielo (1931). Durante su primer viaje, realizado el año 1918, repartió algunos ejemplares de Horizon Carré y difundió los fundamentos del creacionismo.

Este mismo año publicó en Madrid Poemas árticos, Ecuatorial, Tour Eiffel y Hallali, cuatro libros que a pesar de tener una escasa recepción crítica en periódicos y revistas, sí fueron leídos y comentados por jóvenes escritores españoles del círculo de artistas vinculados al poeta y crítico literario Rafael Cansinos Assens, como Guillermo de Torre (1900-1971), Gerardo Diego (1896-1987) y Juan Larrea (1895-1980) (Morales, Andrés. "Huidobro en España". Cyber-Humanitatis. Número 17, verano de 2001).

En un artículo de 1978, Larrea recordó la experiencia que tuvo al leer los libros de Huidobro en 1918 y abordó la relación de este con la vanguardia española: "Cansinos fue tan amable que me prestó Hallali, Tour Eiffel y Ecuatorial, que transcribí de inmediato. El último me produjo una impresión hondísima. Al devolverle los libros tres o cuatro días después, me preguntó Cansinos tras mi gran alabanza de Ecuatorial: '¿Qué libro le recuerda, o con cuál lo relacionaría usted?'. Contesté sin vacilar: 'con el Apocalipsis'" (Larrea, Juan. "Vicente Huidobro en Vanguardia". Revista Iberoamericana. Número 106-107, enero-junio, 1979).

Durante este periodo en España, Huidobro participó activamente en diferentes tertulias y dictó charlas que tuvieron como centro la difusión de sus ideas creacionistas. Para Cansinos Assens, tales planteamientos repercutieron tanto en el modo de concebir su propio quehacer poético como en el de los jóvenes escritores españoles con quienes compartió: "Huidobro nos traía primicias completamente nuevas, nombres nuevos, obras nuevas; un ultramodernismo. Desdeñando a los doctores del templo, el autor de Horizon carré se limitó a difundir la buena nueva entre los pocos y los más jóvenes, en paseos y reuniones sedentes, de un encanto platónico, en que la novísima tendencia lograba la fijación de sus matices" (Citado en Valcárcel, Eva. "Vicente Huidobro y el creacionismo en España". Huidobro homenaje 1893-1993. Universidade da Coruña, Servizo de Publicacións, 1995, p.14).

Para estudiosos como Andrés Morales, el "ultramodernismo" promovido por Huidobro fue uno de los impulsos iniciales del ultraísmo español, a pesar de que tal influencia fue cuestionada al poco andar del movimiento ultraísta: "Como si se tratara de un rápido parricidio, muy tempranamente los diversos autores de ultra (…) se encargarán de señalar la distancia que media entre ellos y el poeta chileno, rechazando la idea de seguir ciegamente los dictados del creacionismo" (Morales, Andrés. "Huidobro en España". Cyber-Humanitatis, Número 17, verano de 2001, p. 17).

Esta controversia sobre el influjo de Huidobro en el ultraísmo, sumada a la polémica con el poeta francés Pierre Reverdy por la paternidad del creacionismo, provocaron "…toda clase de discursos a favor y en contra del chileno" (Morales) y con esto el alejamiento paulatino de Huidobro de los autores ultraístas.