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Gabriela Mistral en El Coquimbo y La voz de Elqui (1904-1914)

"Me puse a escribir prosa mala y hasta pésima saltando casi enseguida desde ella a la poesía, quien, por la sangre paterna, no era jugo ajeno a mi cuerpo"

(Mistral, Gabriela, citada en Gabriela Mistral en La Voz de Elqui. Santiago: DIBAM, Museo Gabriela Mistral de Vicuña, 1992, p. 5)

El 11 de agosto de 1904, Lucila Godoy Alcayaga, nombre civil de Gabriela Mistral, tenía 15 años. En esa fecha específica apareció su primera colaboración en El Coquimbo, diario publicado en La Serena vinculado al Partido Radical.

A partir de ese día y "hasta 1914, aparecieron en la columna de 'Lectura Amena' del diario serenense El Coquimbo" un total de "37 textos, entre los que se consignan: cuentos, prosas, prosas poéticas, cartas, poemas y algunos artículos donde trata, por primera vez, temas relacionados con el quehacer educacional, con especial énfasis en la ley sobre la instrucción primaria obligatoria" (Zegers, Pedro Pablo. "Prólogo". Gabriela Mistral en El Coquimbo. Santiago: DIBAM, Museo Gabriela Mistral de Vicuña, 1994, p. 7)

Durante ese año de 1904, publicó siete textos entre el 11 de agosto y el 17 de diciembre; en 1905, colaboró con trece textos, publicados entre el 26 de enero y el 2 de noviembre; en 1906, solo publicó "Junto al mar", en la edición del 24 de mayo; en 1907, entre el 5 de marzo y el 10 de octubre, cuatro textos; en 1908, seis textos, publicados entre el 16 de enero y el 31 de diciembre; en 1909 publicó los textos "Sobre el centenario" y "Entre los muertos", el 21 de agosto y 9 de noviembre, respectivamente; mientras que entre 1910 y 1914 colaboró con un texto al año.

Estos treinta y siete textos fueron firmados de diversas maneras, con su propio nombre o variaciones (L. Godoy A.; Lucila Godoy A.; Lucila Godoy Alcayaga; L. G. A.), seudónimos ocasionales (Soledad, Alguien, Alma) o con el seudónimo con que el que se hizo conocida mundialmente, Gabriela Mistral: "En este mismo periodo, específicamente el 23 de julio de 1908, la joven maestra envía una colaboración con el título 'Del pasado', donde utiliza el seudónimo oficial de Gabriela Mistral, que la acompañaría hasta sus últimos días, lo que desmiente categóricamente que fue en los Juegos Florales de Santiago, en 1914, donde lo utiliza por primera vez" (Zegers, p. 7).

Además del mencionado poema, Lucila Godoy firmó otros cuatro poemas con el seudónimo Gabriela Mistral en El Coquimbo: "Rimas", del 20 de octubre de 1908; "Después de la lluvia", del 27 de octubre de 1908; "El himno al árbol", del 30 de octubre de 1913; "Tarde", del 21 de febrero de 1914.

De manera paralela, entre 1905 y 1906, también colaboró en el diario de Vicuña, La Voz de Elqui, principalmente con textos en prosa. De los diecinueve textos publicados en el periodo, entre el 23 de marzo y el 21 de diciembre de 1905, publicó el poema "Flores negras" y ocho prosas; entre el 8 de marzo y el 4 de noviembre de 1906, otras nueve prosas y el poema "Al final de la vida", firmados predominantemente con su nombre, el que fue escrito con variaciones menores (Lucila Godoy i Alcayaga; Lucila Godoy y Alcayaga; Lucila Godoi i Alcayaga); y en cuatro ocasiones con el seudónimo Alguien, durante el año 1906.

El 1 de abril de 1909 publicó una última colaboración con el diario, con el título "Habla la anciana experiencia".

Hacia comienzos de la década de 1990, estas colaboraciones de Mistral en los diarios serenenses fueron reunidas en los volúmenes Gabriela Mistral en La voz de Elqui (1992) y Gabriela Mistral en El Coquimbo (1994), gracias a la iniciativa del Museo Gabriela Mistral de Vicuña, con el apoyo de la Dirección de Bibliotecas Archivos y Museos (1929-2018).