El grupo Arúspice surgió oficialmente en la Universidad de Concepción el año 1965, pero ya desde el año anterior sus miembros se reunían bajo el nombre "De los amaneceres" y daban a conocer sus trabajos en una publicación del mismo nombre.

El grupo fue fundado por Jaime Quezada y Silverio Muñoz, a quienes se sumaron Sonia Quintana, Jorge Narváez, José Luis Montero, Edgardo Jiménez, Floridor Pérez y Gonzalo Millán, quien participó del grupo entre los años 1968 y 1969. Todos ellos fueron parte de la revista Arúspice, publicación que tuvo ocho números y que apareció entre 1965 y 1968.

Entre las actividades del grupo cabe destacar los conversatorios con autores como Juvencio Valle, Jorge Teillier, Enrique Lihn y Gonzalo Rojas, entre otros. Estas reuniones tenían lugar los días jueves y contaron con la participación de profesores y críticos como Jaime Giordano, Alfredo Lefevre y Jaime Concha.

El grupo Arúspice estuvo vinculado a la política comprometida y realizó numerosas lecturas invitados por partidos políticos de izquierda, la CUT y el sindicato de trabajadores del carbón de Lota. En 1968, el grupo Arúspice viajó al Valle de Elqui patrocinado por la Universidad de Concepción para realizar una actividad que llamaron: "Acercamiento a la tierra de Gabriela Mistral", tras la cual leyeron en Santiago en la sede de la Sociedad de Escritores de Chile.

En 1969 el grupo obtuvo una beca para realizar estudios en literatura, historia y arte quiteño en la Universidad Central de Quito, Ecuador. En esta oportunidad viajaron Floridor Pérez, Jaime Quezada y Gonzalo Millán. El viaje se extendió a Perú, lo que se tradujo en lecturas no solo en Quito y Guayaquil, sino también en Arequipa y Lima, donde los poetas del grupo Arúspice se reunieron con Arturo Corcuera, Antonio Cisneros y Tomás Escajadillo.

El grupo Arúspice dio por finalizadas sus actividades en las vísperas de 1970, cuando sus integrantes terminaron las carreras que estudiaban en la universidad y empezaron a alejarse de Concepción poco después que ingresaran al grupo los poetas Enrique Giordano y Raúl Barrientos.