Antes de asistir al Ateneo de Santiago, Carlos Pezoa Véliz dio a conocer a Augusto D'Halmar su poesía "Pancho i Tomás". Posteriormente la leyó en la tribuna del Ateneo. No tuvo una feliz recepción para su poesía y la mayoría de los asistentes rechazaron los versos duros y sencillos, desprovistos de imágenes floridas del poeta. Sin embargo, algunos reconocieron su talento y lo impulsaron a seguir escribiendo.

"Porque los chicos son guapos

de talladura y de piel:

viven como unos gazapos

entre el bosque hecho guiñapos

o algún llano sin dintel;

o montados en el anca

frescachona y montaraz

de alguna arisca potranca

que ha crecido en la barranca

sobre la arena feraz..."(fragmento)