Este ensayo de Armando Uribe sobre Paul Léautaud -un "autor francés menor" según Ariel Dorfman- nos muestra, en toda su dimensión, la enorme calidad ensayística del autor. Considerado por algunos críticos como uno de los mejores ensayos literarios escritos en Chile, Uribe despliega en Léautaud y el otro todos sus conocimientos, su capacidad de comprensión y su agudo sentido del humor. Como dice Hernán del Solar, "Nos encontramos ante un género literario que de pronto -serio como es acostumbradamente- recurre a la más extraordinaria cabriola para zafarse de las normas que lo sujetaban y entregarse al libre impulso, a la satisfacción de ser distinto, dueño de su voluntad, que quiere nuevos caminos para cruzar la vida".