Arica
A pesar de que en los valles de Arica y Camarones el conocimiento arqueológico ha sido fundamentalmente funerario, las ocupaciones residenciales fueron bastante potentes desde el quinto milenio antes de Cristo, según lo indican la concentración de cementerios y la densidad de los basureros que allí se encuentran. La arquitectura de la Tradición Chinchorro constaba de estructuras circulares de piedra y postes de madera puestos en forma desviada generando chozas de forma cónica, con fogones centrales y diámetros que variaban entre 1 y 3 metros.
Cerca del siglo IX DC, en la localidad de San Miguel de Azapa se construyó la aldea, conocida como AZ-83, la cual se encontraba muy próxima a campos de cultivo y cementerios de montículos o túmulos. El asentamiento poseía más de 60 estructuras circulares y rectangulares organizadas en torno a patios centrales y levantadas con muros de quincha, consistentes en cañas amarradas y revestidas con barro batido.
Es poco claro aún si durante el primer milenio de la era cristiana, contingentes de población altiplánica del lago Titicaca, como Tiwanaku o Pucara, comenzaron la ocupación aldeana del valle y sus sectores agrícolas más aptos. Posiblemente viviendas de planta rectangular, cimientos de piedra y muros de caña y totora amarrados con sogas sean evidencias de esta antigua civilización.
Contenidos del minisitio
Las investigaciones de Memoria Chilena, Biblioteca Nacional de Chile (Servicio Nacional del Patrimonio) están bajo una Licencia Creative Commons Atribución-Compartir Igual 3.0 Unported, a excepción de sus objetos digitales.


