Disc-jockey
El disc-jockey fue un personaje clave en el desarrollo de la música masiva del siglo XX. Fue el paradigma del cambio de la radio desde su transmisión de música en vivo, a su consolidación como transmisora de música envasada. La "radio-toca-discos" tenía como eje al disc-jockey, quien elegía los temas a transmitir sobre la base de la oferta que le hacían los sellos grabadores, y además generaba la relación directa con el público a través, generalmente, de la línea telefónica.
El primer gran programa de audición discográfica fue Discomanía, que se transmitió por radio Minería. Su primer conductor fue Raúl Matas, figura emblemática de la radiofonía chilena.
En el período en que la Nueva Ola tuvo su desarrollo, aquel cargo lo ocupaba Ricardo García. Fue el principal referente del concepto de disc-jockey para fines de los años 1950 y toda la década de 1960. Pero no sólo García: Antonio Contreras, Miguel Davagnino, Julio Gutiérrez y muchos más, en gran parte marcaron la tónica de la música en aquel entonces. Radio Agricultura, por ejemplo, tenía todos los días un programa de discos destacado: el lunes, Agustín Fernández presentaba música del recuerdo; el martes, Carlos Alfonso Hidalgo adelantaba los éxitos de la música estadounidense; el miércoles, Carlos Santa Cruz hacia escuchar éxitos de la música latinoamericana; el jueves, Julio Gutiérrez daba a conocer los éxitos actuales de la música norteamericana; el viernes, Ricardo García presentaba los éxitos europeos; y el sábado, Camilo Fernández brindaba los últimos éxitos de Estados Unidos.
En mayo de 1959, como reflejo de la importancia que el programador de disco tenía dentro del ambiente musical, se creó la Asociación Chilena de Comentaristas de Discos, cuyo directorio quedó integrado por Ricardo García, presidente; y Camilo Fernández, Agustín Fernández, Julio Gutiérrez y Hugo Ortega, como directores.