"Jotabeche"
Considerado por la mayoría de los críticos como el padre del costumbrismo, José Joaquín Vallejo, con su seudónimo de "Jotabeche", abrió la senda por la que transitarían posteriormente algunas de las mejores plumas de fines del siglo XIX y principios del XX.
Sus cuadros de costumbres, así como sus columnas y artículos en la prensa, mantienen hasta hoy gran parte de su frescura, gracias a su agudo sentido del humor y a su innegable talento para retratar las escenas de la vida cotidiana.