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Se apoderaron de La Serena

El descubrimiento del Cabo de Hornos, en 1615, por los marinos holandeses Cornelio Schouten y Jacob Le Maire, facilitó la ruta de navegación entre los océanos Atlántico y Pacífico, permitiendo que los piratas y enemigos que acosaban las posiciones españolas en El Caribe extendieran sus ataques a los puertos del Pacífico Sur, donde había menos tesoros pero las defensas eran muy débiles.

Acta de Incendio de La Serena

"Yo, don Nicolás Ramírez, escribano público y de cabildo de esta ciudad de la Serena del reino de Chile, certifico y doy fe, como en trece días del mes de diciembre de 1680 años, entró y dio fondo en el puerto de dicha ciudad un navío y de él saltaron en tierra cantidad de hombres con armas de fuego que vulgarmente se dijo que eran ingleses, los que les rechazaron y resistieron a la gente, que con armas salieron de esta ciudad a encontrarlos e impedirles el paso y entrada y por haber dicho los nuestros que sus armas eran muy cortas e inferiores y las de los dichos enemigos muy largas y aventajadas no los podían resistir, con lo cual se entraron libremente en esta ciudad y la saquearon toda y hasta los conventos e iglesias, sin perdonar ni exceptuar lo sagrado y del cultivo divino.

Y luego en diez y seis de dicho mes y año pusieron fuego a lo más del caserío, la iglesia mayor, el convento e iglesia de nuestra señora de las Mercedes, el colegio de la compañía de Jesús y su capilla y una ermita de Santa Lucía.

Y según se dijo por los hombres que andaban de los nuestros con sus armas a la redonda y extramuros de dicha ciudad por haber hecho acciones de embestir al enemigo en la dicha ocasión, tocó arma el dicho enemigo e hizo recoger su gente, por lo cual no acabaron de quemar y poner fuego a todo lo demás que estaba por quemarse y luego trató de retirarse e irse a embarcar en su navío, y en esta forma acaeció el estrago que el dicho enemigo inglés hizo en esta ciudad.

Y las mujeres, niños y demás gentes se retiraron los más a pie y otros en cabalgaduras a valerse de los campos y sierras donde estuvieron hasta que el dicho enemigo se hizo a la vela. Y por haber pasado así, doy el presente en esta dicha ciudad de la Serena del reino de Chile, en treinta y un días del mes de diciembre de mil seiscientos ochenta años; y en la fe de lo referido y ser así y haber pasado como se contiene, lo firmo. Nicolás Ramírez, escribano".

Concha, Manuel. Crónica de La Serena, de su fundación a nuestros días 1549-1870. La Serena: Imprenta de La Reforma, 1871, p. 91.