El Premio Bicentenario fue instaurado en el año 2000 con el fin de distinguir y reconocer a una personalidad nacional que se haya destacado en el ámbito de la cultura y el servicio a su país, y cuya trayectoria haya reflejado el espíritu democrático y republicano de éste.

El premio fue entregado en forma anual hasta el año 2009. Junto a Mateo Martinic, que fue reconocido el año 2006, han sido beneficiados el empresario Eugenio Heiremanns (2000), el abogado y político Gabriel Valdés (2001), el poeta Nicanor Parra (2002), el Padre Gabriel Guarda (2003), el musicólogo Luis Merino (2004), el doctor Fernando Monckeberg (2005), la experta en educación Patricia Matte (2007), el arquitecto Fernando Castillo Velasco (2008) y el Padre Renato Poblete (2009).