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Pintura

Además de su intensa labor literaria, Luis Enrique Délano dedicó una parte importante de su inspiración a la pintura. Aunque se definió como "pintor de día domingo", sus obras pictóricas llegaron a ser más de un centenar, repartidas en distintas técnicas como óleo, acuarela, tintas, entre otras. Poli Délano, hijo del escritor, señala: "Él comenzó a pintar a capella, pero en Nueva York siguió cursos de pintura con Mario Carreño, sistematizándose aún más. Además, había estudiado historia del arte en Madrid, pasando por muchas de las tendencias de la cultura contemporánea. (...) Una de las cosas que prima (en su pintura) es la imaginación y humor en la pintura: hay una chispa lúdica más que en los libros tal vez". (Poo, Ximena. "Rescatan la desconocida faceta de pintor Luis Enrique Délano", La Época, 10 de mayo, 1994. p. B15)