La compositora Marta Canales nació en Santiago en 1895. Su familia, los Canales Pizarro, vivía en una casa en calle Rosas que fue un verdadero centro cultural. Por ella circularon muchas personalidades de la música, como Claudio Arrau y Arthur Rubinstein, entre otros. Marta creció en este ambiente y así su formación musical fluyó rápidamente. Su "oído absoluto" le permitió dominar varios instrumentos como el piano y el violín, aunque fue en la interpretación de este último donde más se desarrolló.

A los 11 años de edad, se presentó por primera vez en público tocando ese instrumento. Formó junto a sus hermanos un conjunto de cámara, que tuvo gran actividad entre 1916 y 1920. Ya adulta, comenzó sus estudios de composición con el profesor Luigi Stefano Giarda.

En 1920 recibió el encargo de escribir una misa por parte de la Comisión del Congreso Eucarístico. Esta se estrenó en la Catedral de Santiago bajo la dirección de Armando Carvajal. Posteriormente, la composición sacra fue editada por Ricordi en Milán.

Su principal actividad fue la composición y, luego, la dirección coral. Marta Canales fue la primera directora que se presentó en el teatro Colón de Buenos Aires con un coro de 120 voces. Formó diversos coros como el Amalia Errázuriz, del año 1933, y dirigió desde 1944 el coro Ana Magdalena Bach.

Junto con difundir la música en esos años, repitió lo que había vivido en su infancia, transformando su casa en centro de tertulias musicales a las cuales asistían Domingo Santa Cruz, Alfonso Letelier y otros compositores y artistas.

En 1936 recibió el premio de Exposición de Sevilla.

Entre sus obras destacan Madrigales Teresianos, Misa de Navidad y obras de inspiración gregoriana. Entre las no religiosas destacan sus Canciones de cuna, Cantares chilenos, resultado de una investigación sobre el folclore aplicada a música coral.