"Antes del golpe estábamos trabajando con Víctor Jara en una obra mía llamada La virgen de puño cerrado, cuyo papel protagónico había sido escrito para Ana González, que se encontraba momentáneamente fuera del país. Después del golpe mataron a Víctor y las cosas se pusieron muy difíciles. Había toque de queda; mi mujer no soportaba ver a los carabineros en la calle con sus bayonetas con bala pasada; una actriz fue apresada por ser la mujer de un ex GAP, y el título de la obra tuvo que se cambiado por La virgen de la manita cerrada. En fin, fue una época dura; sobre todo, traumática" (Sieveking en Guerrero, Eduardo. Acto único, p. 214).

En abril de 1974, Alejandro Sieveking y Bélgica Castro junto a la compañía El Ángel elaboraron un repertorio -que incluía Cama de batalla y la versión de Pedro Orthus para La Celestina- que les permitió itinerar por Ecuador, Colombia, Costa Rica, Guatemala y El Salvador. "Como el país donde mejor nos había ido era en Costa Rica, el administrador nos contactó con el Ministro de Cultura, quien nos posibilitó una instalación inmediata. Allí estuvimos diez años" (ibíd.).

Durante su estadía en Costa Rica, Sieveking no escribió tanto como solía hacerlo; en vez, instalaron un teatro para la compañía El Ángel donde Sieveking dirigía todas las obras y hacía todos los diseños de vestuario. Además, hacía ese trabajo e incluso actuaba para otras compañías.

En 1984 Alejandro Sieveking regresó a Chile junto a Bélgica Castro, tentado por la idea de escribir los guiones para una serie para Televisión Nacional de Chile.