A fines del siglo XIX el progreso industrial intensificó el desarrollo de las tecnologías de impresión y del mercado de las artes gráficas en Chile, razón por la cual se vivió un incremento en la importación de insumos, el interés de compañías internacionales y el surgimiento de comercializadoras especializadas, como fundidoras y distribuidoras de tipos de imprenta en el país. Entre los impulsores de este mercado para las artes gráficas se encuentra Alfredo Lüer Georgi (Soto Veragua, Jorge. Historia de la imprenta en Chile. Desde el siglo XVIII al XXI. Tomo 1, 2009, p. 258), quien fue parte de la Casa Brandt y Cía., fundada en 1892.

Considerada una de las primeras y más grandes importadoras de tipos para imprenta a nivel nacional, esta sociedad pasó a convertirse posteriormente en Lüer, Paye y Cía., cuyo enfoque potenció el desarrollo de la actividad gráfica local, tanto a través de iniciativas como la edición de la revista Noticias Gráficas (1903-1939) (Álvarez Caselli, Pedro; Historia del diseño gráfico en Chile. Santiago: Consejo Nacional del Libro y la Lectura, 2004, p. 72) como por su protagonismo en la comercialización de este tipo de insumos.

En las primeras páginas de su catálogo publicado en 1930, se señalaba de forma explícita que sus tipos provienen directamente de la fundición alemana Genzsch y Heyse A. G. (Tipos. Santiago: Lüer y Paye, 1930) y que la compañía, además de tener sucursales en Santiago, Valparaíso y Concepción -las principales ciudades en la distribución de tipos en el país- comercializaba también sus fuentes en Bolivia.

Lüer, Paye y Cía., disponía de fuentes tanto para libros como para periódicos y revistas; entre las familias tipográficas que incluye el catálogo se pueden apreciar familias transicionales, familias modernas, sin serifas, y de fantasía, todas estas en sus variantes regular, negrita y cursiva. Otro catálogo que posee características similares en relación con su contenido es el Muestrario de tipos, filetes y viñetas de la Imprenta Excelsior de 1952.

Durante el periodo, la American Type Founders (ATF), un fideicomiso estadounidense fundado en 1892, se constituyó como otro proveedor de tipos en nuestro país, abasteciendo a los impresores locales por intermedio de "La Compañía Americana", su representante en Chile (Malacchini Soto, Simoné. Lira Popular: Identidad gráfica de un medio impreso chileno. Santiago: Ocho Libros, 2015, p. 137).

El catálogo Tipos. Mostrario de tipos, adornos, orlas y rayas de 1900 exhibe muchas fuentes que pueden identificarse en impresos de la época en Santiago y Valparaíso, incluso en algunos documentos anteriores a la fecha de iniciación de la ATF, esto debido a que antes de su conformación, las distintas fundiciones tipográficas que la componían, ya lograban hacer llegar sus fuentes a nuestro país. En este muestrario es posible encontrar la mayoría de los tipos que se emplearon en la composición de la Lira Popular (Malacchini, p. 136).

Otro de los folletos tipográficos de los cuales se tiene registro y en el cual se pueden identificar tipos tanto de la Lira Popular como de periódicos y otros impresos de la época es el Catálogo de Tipos de la Imprenta y Librería Artes y Letras (1924), que está compuesto con fuentes garaldas y transicionales para libros y periódicos respectivamente, además de poseer tipos ornamentales: íconos, filigranas, ilustraciones, entre otros. Cuyo propósito era acompañar a la letra en la composición de las páginas; la fuente utilizada para el título del primer número de La Aurora Feminista se encuentra en la página 25 de este catálogo.