Subir

José Camilo Gallardo (1774-)

José Camilo Gallardo, "bautizado en la catedral de Santiago el 21 de julio de 1774", fue un impresor y el primer tipógrafo chileno del que se tiene registro.

A temprana edad asumió como "bedel mayor en la Universidad de San Felipe". Desempeñó el cargo por bastantes años y tuvo la oportunidad de instalar un taller de imprenta en la misma institución. En aquel taller produjo impresos para diversos fines, entre ellos, dos añalejos -especies de calendarios eclesiásticos- creados entre 1800 y 1801 en donde figuró por primera vez en Chile la firma de un tipógrafo: "Typis Camili Gallardo" (Medina, José Toribio. Bibliografía de la imprenta en Santiago de Chile desde sus orígenes hasta febrero de 1817. Santiago de Chile: Fondo Histórico y Bibliográfico José Toribio Medina, 1961, p. XVII-XVIII).

Continuó su labor de impresor de forma intermitente y en 1810 imprimió la invitación oficial al Cabildo Abierto del 18 de septiembre que dio inicio al proceso de Independencia. Ese mismo año postuló al cargo de "sota-síndico" del Cabildo de Santiago, ofreciendo sus aptitudes de impresor y tipógrafo, encomendándose a cubrir con las necesidades de la Corporación y cumpliendo "fielmente lo que por lo tocante a impresiones había ofrecido": "Obra suya fueron las dos esquelas con que se invitó al pueblo de Santiago a elegir sus diputados el 1° de abril de 1811 (…) y a la otra elección celebrada con idéntico objeto el 6 de mayo de aquel año" (Medina, p. XX).

Según José Toribio Medina (1852-1930), aunque no se tiene certeza de las tareas que desempeñó, "es indudable" que Gallardo trabajó en la imprenta de la Aurora de Chile (1812-1813) junto a los estadounidenses Samuel Burr Johnston y Simon Garrison, encargados de la impresión del primer periódico nacional: "A principios de 1813 se hallaba empleado en el establecimiento, según aparece del siguiente aviso publicado en el número 4 del periódico del 28 de enero de aquel año: 'Se vende con equidad un coche forrado en terciopelo de seda, charolado y colgado a la moda, con ladillos de cristal, y también de madera: quien quisiese comprarlo, y las guarniciones para el tiro, ocurra a don Josef Camilo Gallardo, en la Oficina de la Imprenta" (p. XX).

A partir de junio de 1813, tras la ausencia de los impresores estadounidenses que dejaron el país, Gallardo se hizo cargo de la Imprenta de Gobierno, como se indicaba en un "Aviso al público" aparecido en la edición del 29 del mismo mes de El Monitor Araucano (1813-1814), periódico sucesor de la Aurora: "D. José Camilo Gallardo ha arrendado la imprenta perteneciente al Gobierno; los que tengan algo que imprimir se entenderán con él y lo hallarán en su oficina" (citado en Medina, p. XX-XXI). En El Monitor, trabajó como impresor al menos desde el número 39, del martes 6 de julio de 1813, pues en el pie de imprenta se indicaba: "Santiago de Chile: en la imprenta de Gobierno. Por D. J. C. Gallardo". Respecto de los impresores de las ediciones anteriores de El Monitor, figuraron los citados Samuel Burr Johnston y Simon Garrison, en sus tres primeros números; en el quinto, Garrison y Allonzo Benites; entre los números 6 y 38 no se indica nombre de impresor.

Con esta nueva investidura de administrador de la imprenta de Gobierno, Gallardo aprovechó la oportunidad no solo para dedicarse a imprimir, sino también para instruir a jóvenes en la disciplina, entre ellos a Antonio Jara, Eusebio Molinare, José Silvestre Pérez, entre otros (Hernández Cornejo, Roberto. 200 Años de la 'Aurora de Chile'. Talca: Horacio Hernández, 2012, p. 33).

Durante el período conocido por la historiografía tradicional como Reconquista española, las tropas realistas encabezadas por Mariano Osorio tomaron el control de la imprenta de Gobierno, a pesar de lo cual Gallardo continuó en su puesto, trabajando para los realistas en la impresión del periódico ¡Viva el rey! Gazeta del Gobierno de Chile (1814-1817). Según Medina, esta situación sucedió "tanto porque el impresor chileno, en el fondo de su corazón, era godo, como porque en realidad nadie más que él habría podido manejar aquellos endiablados caracteres con los cuales se proponía 'hacer que la imprenta de Chile, hija de una revolución, hablase verdad por primera vez'" (Medina, p. XXI).

Según la visión del tipógrafo chileno sobre estas circunstancias, recogida por José Toribio Medina, los patriotas, en su fuga, tras inspeccionar "las oficinas y casas, se llevaron consigo toda la letra y útiles de imprenta (…). Felizmente, se ha recogido la poca letra despreciada por inútil, pero virgen de las maldades de La Aurora, del Monitor, Semanario y otros; y ha sido preciso concluir la impresión de una plana, deshacer la letra, y formar otra, y así sucesivamente" (Gallardo, citado en Medina, p. XXII).

Después de la Batalla de Chacabuco, ocurrida el 12 de febrero de 1817, Gallardo fue separado de su cargo de administrador de la Imprenta de Gobierno. No obstante, continuó vinculado a ella cuando, el 25 de abril de 1818, Pedro Cabezas fue nombrado como su nuevo administrador. Aquí imprimió calendarios y almanaques por lo menos hasta 1821 (Medina, p. XXIV-XXV).

Los últimos impresos que hizo Gallardo no se conservan, ya sea por sus "tiradas poco numerosas", "la corta extensión de esos trabajos", "la falta de bibliógrafos cuidadosos", la ausencia de interés en ellos o debido a la orden dictada por el Gobierno de O'Higgins en 1819 de economizar papel blanco, razón por la que se requisaron "todos los impresos inútiles que se encuentren" con el propósito de ser destinados "a mejores fines" (Medina, p. XXVI).

Los siguientes años de la vida del impresor y tipógrafo José Camilo Gallardo, su paradero y las circunstancias de su muerte siguen siendo desconocidos.