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Casa Vernácula

Al enfrentarse a la necesidad de un espacio y un techo, el ser humano ha inventado y dado forma a distintas posibilidades de casas. Este objeto cultural ha cubierto un requerimiento humano y social existente desde la prehistoria, atravesando distintos periodos y regiones del territorio.

En Chile, gran parte de las viviendas se construyen sin necesidad de profesionales, aplicando muchas veces un saber empírico que establece relaciones creativas entre distintas necesidades domésticas, distintos climas, distintas materialidades disponibles y distintas formas de expresión cultural. A ese conocimiento pre-arquitectónico refiere Casa Vernácula, ya que la casa es anterior al surgimiento de la arquitectura como profesión.

Esta arquitectura sin arquitectos adapta sus construcciones a las posibilidades y limitaciones del entorno, siendo a su vez sustantiva en la conformación de las identidades de los diferentes pueblos que habitan el territorio chileno.

  • Los Pinales de Nahuelbuta: Luego de haber sido contratado en 1830 por el gobierno chileno para realizar un viaje científico de acopio y registro de la naturaleza de este territorio, el naturalista francés Claudio Gay (1800-1873) publicó en París su famosa Historia Física y Política de Chile, que fijó en textos, mapas e ilustraciones sus investigaciones. Algunas de las láminas que ilustran esta obra muestran distintas localidades del país, informando sobre sus variados tipos de viviendas. Estas fueron realizadas por grabadores en base a croquis de Gay, que luego se imprimieron por distintas compañías litográficas francesas. Como han subrayado los historiadores Lorraine Daston y Peter Galison en su libro dedicado a la imagen cientifica, la ilustración científica decimonónica implicaba procesos de traducción que muchas veces podían verse intervenidos por prejuicios raciales o arquetipos visuales eurocentrados, que imprimieron un carácter exótico a aquello que era desconocido o lejano (Objectivity, 2007). En el caso de los toldos en Nahuelbuta, éstos se asimilan más a los tipis de los indios norteamericanos que a las tiendas que realmente usaban los mapuche o los fueguinos, las que en general presentaban una estructura a dos aguas.
  • Histórica Relación del Reyno de Chile: En 1646, un siglo después de la llegada de los españoles a Chile, el jesuita Alonso de Ovalle publicó en Roma la Histórica Relación del Reyno de Chile, crónica que pretendió dar a conocer el territorio y atraer a misioneros europeos para que vinieran a trabajar. "De este modo los indios llevan sus casas, trasladándolas de un lugar a otro", dice la inscripción en latín de este grabado, que forma parte de una serie de ilustraciones de paisajes y tradiciones locales. Junto con una decena de dibujos de fachadas de templos jesuitas incluidos en la crónica, estos grabados de Ovalle son las imágenes más antiguas que conocemos de arquitectura chilena.

    Minisitio desarrollado en colaboración con Centro Cultural La Moneda en el marco de la exposición Casa Chilena. Imágenes domésticas.