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Hans Frey Film

Hasta la celebración del Centenario de Chile, la mayor parte de la producción fílmica del país se concentraba en las denominadas "actualidades", registros documentales breves que cumplían un rol informativo y muchas veces eran integradas a noticieros cinematográficos. La producción de películas de argumento fue paulatinamente consolidándose con la aparición de compañías productoras como Chile Films y Hans Frey Film.

La productora Frey Films fue fundada por el fotógrafo suizo radicado en Chile Hans Frey (1865-1928), quien también era dueño de un conjunto de tiendas de artículos fotográficos y cinematográficos. Frey aprovechó los materiales técnicos que tenía gracias a la casa comercial y, luego de reunir a un equipo de profesionales chilenos y extranjeros, comenzó a filmar películas de argumento y documentales en el año 1917.

La primera película que produjo Hans Frey Film fue Alma chilena (1917), dirigida por el cineasta argentino Arturo Mario (1880-1943) y protagonizada por la actriz uruguaya María Padín (1888-1970). La pareja fue reclutada por la casa productora debido al éxito de crítica y audiencia que había tenido con el estreno en Argentina del filme Nobleza gaucha (1915).

Alma chilena fue estrenada el 6 de septiembre de 1917 en el teatro Victoria de Valparaíso y, luego, se exhibió en gran parte de las salas de cine del país. La obra inmediatamente generó una buena recepción, teniendo presencia en gran parte de las revistas de cine de la época. Por ejemplo, Juan Ulloa, en su artículo "Alma Chilena" publicado en la revista Zig-Zag, la describió como "un éxito indiscutible", sugiriendo que representaba "un progreso a todas luces en la cinematografía nacional". De acuerdo con Ulloa, Alma chilena era "un acierto innegable de la empresa editora" y abría "el camino para una proyección fecunda" que fuera "presentando en el lienzo los aspectos más interesantes de la naturaleza y del alma criollas" (Ulloa, Juan. "Alma Chilena". Zig-Zag. Número 657, 22 de septiembre De 1917, citado en Bongers, Wolgang. Archivos y letrados: escritos sobre cine en Chile (1908-1940). Santiago: Editorial Cuarto Propio. 2011, p. 218-219).

La irrupción de Arturo Mario en la cinematografía chilena continuó luego de Alma Chilena con la segunda película producida por Hans Frey Film: Todo por la Patria, estrenada el 3 de mayo de 1918 en los teatros Colón y Alhambra de Valparaíso. Esta película, al igual que su película anterior, tuvo una recepción positiva por parte del público y de la crítica.

A propósito de la relevancia del filme, Augusto Pope en su artículo dedicado a Todo por la Patria publicado en Cine Gaceta anunció: "Ya en ocasiones anteriores hemos aplaudido el espíritu netamente nacionalista en que está inspirada la dirección de la Frey Film. Sus películas no solamente serán de argumento criollo, sino que también serán interpretadas por artistas nacionales. En el reparto de Todo por la Patria no hay más extranjeros que Arturo Mario y María Padín, quienes, por lo demás, están completamente chilenizados" (Augusto Pope. "Todo por la Patria". Cine Gaceta. Número 11, segunda quincena de febrero de 1918, p. 16).

Al igual que Alma Chilena, la que tenía una fuerte presencia de la tradición criolla, Todo por la Patria no abandonó los contenidos patrióticos, situando su trama en el contexto de la Guerra del Pacífico. La película estaba basada en la opereta de Luis F., de Retana El jirón de la bandera (1910) y trataba sobre "un dueño de fundo que, guiado por el amor a la patria, perdona a su primogénito por haberse enamorado de Rosa, hija de uno de sus inquilinos, al enterarse que Luis, el hermano de la muchacha, había muerto durante la toma del Morro de Arica" (Jara, Eliana. Cine Mudo Chileno. Santiago: Fondo de Desarrollo de la Cultura y las Artes. 1994, p. 40).

La tercera película producida por Hans Frey Film fue La avenida de las acacias (1918). Estrenada pocos meses después de Todo por la Patria, el 20 de julio, en los teatros Colón y Apolo de Valparaíso, esta comedia de género policial tenía a Pedro Sienna (1893-1972) como protagonista (Jara, p. 41).

Además de las películas de argumento, Hans Frey Film produjo dos registros documentales, el primero en 1918: Los submarinos en aguas chilenas (1918), bajo la dirección de Francisco von Treuber, quien fue el director de fotografía y camarógrafo de todas las producciones de Hans Frey Film. El filme mostraba a una cuadrilla de submarinos adquiridos por la Armada de Chile mientras se desplazaban por alta mar para llegar a Chile, donde una gran multitud los recibió (Vega, Alicia. Itinerario del cine documental chileno 1900-1990. Santiago: Universidad Alberto Hurtado. 2006, p. 63). El segundo registro documental producido por la compañía Frey Films fue El gran temporal de Valparaíso (1919), dirigido por Carlos Eckardt. Esta película mostraba los "desastrosos efectos causados por el temporal ocurrido en Valparaíso en 1919" (p. 65).

La producción cinematográfica de la compañía Hans Frey Film tuvo un dramático final en el año 1919, producto de un incendio que destruyó los estudios ubicados en Valparaíso y, prácticamente, todo el material producido.