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Los nuevos. (La joven literatura chilena) (1912)

Un sentido de orientación autóctono se impone en nuestra literatura; mas ha de ser ajeno a todo patriotismo declamatorio, exaltado e infructuoso. Nuestra vida cívica está aún virgen: pocos son los que han intentado novelarla; quien la estudie y la observe encontrará en ella el más rico de los veneros artísticos. Cada problema nuestro aguarda al mago futuro que lo analice y lo plantee: sea el del inquilinaje, el de nuestra lucha de clases, el del feudalismo político o el de la extirpación de las postreras energías de la raza araucana

(Donoso, Armando. Los Nuevos. Valencia: Impr. F. Sempere, 1912, p. XVIII).

Los nuevos, primera colección de ensayos de Armando Donoso, fue publicado en España en el año 1912. Este libro examinó parte del mapa literario chileno del tiempo, en un contexto general de reflexión sobre los valores nacionales, que se extendió desde el campo de la cultura hasta la economía.

Durante este periodo -caracterizado por la consolidación del capitalismo como modelo económico, la aparición incipiente de una cultura de masas y de los primeros movimientos sociales chilenos-, surgió un conjunto de intelectuales, como Nicolás Palacios (1858-1927), Tancredo Pinochet (1880-1957) o Francisco Encina (1874-1965), que denunció el desprestigio de lo nacional derivado del proceso de modernización socioeconómica.

En el dominio de la literatura, este desprestigio consolidó -en palabras de Guillermo Feliú Cruz- la "indiferencia por lo chileno" entre los lectores y la intelectualidad nacional, que renegaba "del arte chileno, de la ciencia chilena, de las costumbres chilenas, del ambiente chileno" (Armando Donoso y su tiempo. Vida y obra de un crítico literario. Santiago: Nascimento, 1969, p. 104).

Frente a este clima literario, al que "bien poco o nada le interesa la obra nacional", acostumbrado al consumo de "los folletines de Ponson du Terrail o de la Invernizio" (Donoso, p. XX), Donoso vio en la escritura de sus contemporáneos los indicios de una nueva literatura, caracterizada por una "honda preocupación territorial" y, en consecuencia, el momento inaugural de una tradición literaria propiamente chilena: "Ciertas obras como Raza chilena, Idilio nuevo, Durante la reconquista, Sub-terra, Páginas chilenas, Palpitaciones de vida, Escenas de la vida campesina, Cuesta arriba y los cuentos de Federico Gana, son representativas ya en la formación de la literatura chilena actual; acusan la iniciación -aunque entre aquellas las obras de Blest Gana datan de treinta años- de un período que se irá encauzando a medida que el arte llegue a tener entre nosotros un valor propio" (p. XVIII).

Concebido como una reunión de ensayos sobre literatura nacional, el libro de Donoso se constituyó en uno de los primeros estudios de la obra de los narradores Baldomero Lillo (1867-1923) y Rafael Maluenda (1885-1963), de los poetas Francisco Contreras (1877-1933), Víctor Domingo Silva (1882-1960), Jorge González Bastías (1879-1950), Carlos Pezoa Véliz (1879-1908), Carlos R. Mondaca (1881-1928), Ernesto Guzmán (1877-1960) y del crítico nacido en Francia Omer Emeth (1860-1935).