Los primeros clubes de fútbol fueron fundados por inmigrantes ingleses, fenómeno que se expandió por el resto de las colonias recién llegadas a principios del siglo XX. Los inmigrantes encontraban en el deporte, y en el fútbol en particular, un espacio de identificación y de comunidad que les permitía reunirse y a la vez de integrarse con las mismas formas de participación que utilizaban los chilenos.

Un caso único el mundo sucede con el Club Deportivo Palestino. Fundado oficialmente en 1920, durante unas olimpiadas deportivas de inmigrantes palestinos en Osorno, es el único equipo de fútbol que lleva el nombre de Palestina y que en su camiseta están los colores de la bandera y el mapa del territorio del pueblo Palestino.

Pese a que en un comienzo los seguidores y jugadores de estos equipos correspondían a los extranjeros que se instalaban en el país, con el tiempo, los hinchas se han chilenizado, al igual que sus jugadores.